martes, 1 de mayo de 2007

Los Adivinos tienen razón



Nos reunimos en el lugar acordado, llegaste puntualmente 5 minutos más tarde. Preguntaste si había llegado hace mucho rato, sólo dije que hace unos minutos, sin embargo, por los nervios llegué media hora antes.

Entramos al café. Nos sentamos cerca de la ventana para ver como llovía. Aún recuerdo cuánto nos gustaba, y disfrutábamos pisando las posas de agua. colgamos nuestros abrigos, y en un acto de refinada caballerosidad, te ayudé a sentarte. nos sentamos frente a frente, aproveché el espacio de la mesa para tomar esa táctica posición: frente a tí, para ser directo, claro, al alcance de tus manos, cerca de tí, y quien sabe, si "el destino quería": de tus labios.

El Local tenía las luces bajas, y se tocaba una música que hacía íntimo el lugar. Éramos sólo tú y yo.

Después de hacer nuestra orden, sentí que llegaría un gran momento. La gitana me lo auguró y el horóscopo también lo dijo: "tendrás un gran giro en tu vida". Esa "cita" lo era todo: me declararía, y empezaríamos algo lindo, algo largo, algo nuestro. Empezaría a compartir mi vida contigo.

Conversamos de distintos temas. Creo que hasta mencionamos el Transantiago. Llegaron los cafés. Al avanzar la velada, me dí cuenta de que tus intereses eran distintos a los míos. No veíamos la vida de la misma manera, a pesar de nuestras conversaciones anteriores, y de creer que así era. Mis intenciones empezaron a cambiar. Mientras ella hablaba, me iba dando cuenta de estas cosas, y cuando tocábamos el tema de nuestros compañeros, y mencionaste a la Julieta (la joven a la cual rechazé por intentar algo contigo, y que quedó muy muy mal) mi mundo se vino abajo. Creo que hasta el café, al oírla hablar de eso y de lo que hice, se enfrió.

Me di cuenta de que no quería nada con ella. ella prefería una tarde de compras a una tarde en una plaza conmigo. preferiría ir al mall a ver ropa que libros. Su tesoro más preciado era su ropa, perfumes y accesorios. Le gustaban las puestas de sol porque significan (al menos para ella) el inicio del carrete. Necesita emborracharse para evadirse y superar los problemas, y siente que la mujer es el eje central de el vínculo llamado relación amorosa o pololeo. cosas que la Julieta JAMÁS haría ni pensaría. Más estúpido que tener amándote tu "otra parte" y la rechazes.

Apenas termino de pensar en esto, su pregunta me despabila: "Arturo, te gustaría pololear conmigo??"

Quedé en estado de shock.



Rato después, salía del café con intenciones de caminar bajo la lluvia. Me lo adivinaron, "mi vida cambiaría". Son las 10 pm del Viernes, Julieta, espero que estés despierta.

1 comentario:

Miss.Belerielle dijo...

Uf!
Me encantó :D
me gustan tus escriitos gordo, me gustan tus escenarios, son tan tuyos ^^
y yo me siento orgullosa de "Traerte a la vida"; como dijiste tú.

besitos muchos :*,

tú godda :$